Líderes opositores han sido arrestados por el régimen chavista y su búsqueda continúa. Desde la comunidad internacional la tensión aumentó tras peligrar la seguridad del presidente interino Juan Guaidó.
Durante la noche del miércoles 8 de mayo, el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional detuvo al vicepresidente de la Asamblea Nacional venezolana, Edgar Zambrano, por participar en el levantamiento militar del pasado 30 de abril.
Desde Estados Unidos, las amenazas fueron claras tras la detención del magistrado Zambrano, en las que instruyeron que habrá consecuencias.
Esto provocó que la tensión aumentase entre los opositores y los adherentes al régimen chavista, desencadenándose una serie de advertencias por parte de la comunidad internacional, en la que enfatizaron en “no tocar a Juan Guaidó”, a modo de advertencia.
“Por qué tienen miedo. Los que precisamente tratan de infundir o generar percepción de control, son los que no lo tienen”, respondió Juan Guaidó al referirse a su teoría de por qué aún no es detenido.
“He hablado con muchos funcionarios de muchos rangos en las Fuerzas Armadas e incluso en el régimen para lograr la transición en Venezuela”, agregó el líder de la oposición en Venezuela.
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Sin embargo, el secuestro de Zambrano no es el único objetivo del régimen chavista. La orden de detención contra algunos diputados opositores sigue en pie y algunos opositores, como Richard Blanco, presidente de la Alianza Bravo Pueblo, opositora a Maduro, solicitó refugio en la embajada de Argentina. Lo mismo hizo la parlamentaria Mariela Magallanes, quien está refugiada en la sede diplomática venezolana en Italia.
“El riesgo de que vaya preso Guaidó es el riesgo que tienen todos los venezolanos hoy día. Todos los venezolanos que se manifiestan por la libertad son reprimidos, no nos extraña entonces que vayan a arremeter contra Juan Guaidó”, dijo Eudoro González, embajador del presidente de la Asamblea Nacional en Austria.
“La Unión Europea tiene que tomar nota de estos asuntos, pero tomarlos con mucha seriedad, y el grupo internacional de contacto tiene que tomarse en serio el tema de Venezuela, porque la deriva que ha tomado Nicolás Maduro y su gobierno es efectivamente una deriva dictatorial y que viola todos los derechos, ya no sólo de la humanidad, sino de la civilidad y cualquier ley que a usted se le ocurra. Ahí son violadas de manera sistemática”, expresó al respecto William Dávila, dirigente opositor venezolano.
Finalmente Juan Guaidó convocó a una movilización para el próximo sábado 11 de mayo a las 10:00 horas para dar a conocer los distintos puntos de reunión y analizar la situación venezolana. Además pidió a la Organización de Estados Americanos (OEA) una sesión de emergencia tras la detención de los parlamentarios.
Las actividades están enmarcadas en el lema "Salgamos a jugar", por lo que el énfasis estará en los juegos tradicionales y la "transmisión intergeneracional de la riqueza cultural". La jornada se realizará en 16 regiones del país.
