La psicoanalista cuestionó la noción de salud mental en la sociedad actual y su aplicación en los tratamientos médicos. "El problema es cuando de manera homogénea, todos los malestares se empiezan a encasillar y se empiezan a tratar de esa manera, luego dejamos de entender”, expresó la escritora.
Constanza Michelson, psicoanalista y escritora, tiene una visión crítica sobre la noción de salud mental y su aplicación en la sociedad. “Hay sociedades más medicalizadas que otras, Estados Unidos desde luego es una y Chile adoptó ese modelo. Entonces ocurre que se nos olvida pensar para qué nos sirven los diagnósticos”, afirmó la especialista en Sana Mente de CNN Chile.
La autora del libro Hacer la noche aclaró que los diagnósticos sirven para identificar ciertos malestares similares, pero no son una verdad definitiva. “Desde qué perspectiva vamos a comprender qué es la salud mental, cómo se la nombra, cómo se etiquetan los diagnósticos, cómo se la trata y cómo se aborda, eso hace mundos de diferencia”, reflexionó.
“El problema es cuando empezamos a pensar que el mapa es el territorio y que el diagnóstico es la verdad de lo que le ocurre a una persona. Luego, se le quita a esa persona la posibilidad de decir algo sobre sí misma”, aseguró.
Lee también: Pamela Gana: “La salud mental no es solo la ausencia de enfermedad, es también bienestar”
Michelson habló de las dificultades que ve en los tratamientos de salud mental en la actualidad. “El problema es cuando de manera homogénea, todos los malestares se empiezan a encasillar y se empiezan a tratar de esa manera, luego dejamos de entender”, dijo. Puso el ejemplo de la depresión, que, a su juicio, se trata como “una especie de espectro, de depresión leve a depresión mayor”.
El lenguaje es fundamental para sanar, pero también nos puede enfermar, a juicio de la especialista. “Hacer de las palabras algo que nos recoja, que nos alivie, que nos permita comprender y crear mundos. O bien, los lenguajes van dejándonos cada vez más mudos o van simplificando, por lo tanto, no es raro este hundimiento del lenguaje y caer en estados en que la palabra no opera”, planteó.
Michelson criticó la falta de comprensión de la salud mental bajo el modelo “ultra medicalizado”. “La locura, nosotros decimos en psicoanálisis, es un cruce entre la historia pequeña, la historia individual, y la gran historia. La locura siempre dice algo de la época y a veces no la escuchamos”, dijo.
Lee también: Susan Fiske y los estereotipos: “No tenemos tiempo para darle sentido a las personas”
La psicoanalista comentó las consecuencias de vivir “en una guerra psicológica” en la actualidad. “Lo que ocurre es que cuando hay miedo, cuando hay daño, cuando hay trauma, por distintas razones, el pensamiento en masa o en general la paranoia, lo que genera es un alivio medio perverso de esos sentimientos. Los reproduce y genera venganza”, indicó.
Michelson explicó posibilidades de reparar los traumas en la sociedad chilena. “Estamos en tiempos en donde la política debería ser terapéutica, desinflamar. ¿Cómo se desinflama? Apuntando a proyectos que tengan que ver con un sentido en común, que apunten a encontrarnos, todos los temas de reconciliación son fundamentales y me parece que Chile es un país donde eso está pendiente, donde hay algo que no se repara”, detalló.
“Se habla mucho de cómo generar instituciones que promuevan, más que estandarizar los tratamientos, promover lo singular, que es lo que permite pensar a solas para poder estar con otros, pero pensar a solas, digerir el trauma, integrar”, analizó.
Experto en política estadounidense y ex subsecretario de Asuntos Hemisféricos de EE.UU., el cientista político chileno analiza las elecciones presidenciales y su impacto en la relación de EE.UU. con América Latina.
