Luis Castellanos y el valor del lenguaje positivo: “Las palabras generan salud”

Las palabras que escogemos en nuestro día a día determinan nuestra salud mental. Así lo asegura Luis Castellanos, pionero a nivel mundial en la investigación del lenguaje positivo y su influencia en la mente humana. “Las palabras generan salud, las palabras hacen que tengamos bienestar, el lenguaje de la salud hace que tengamos mente sana. Nos hablamos todos los días de nuestra vida desde que nacemos, hasta que morimos, por lo tanto, la relevancia es fundamental”, explicó el filósofo en Sana Mente de CNN Chile.

El español abordó la importancia del lenguaje en la educación de niños y jóvenes. “Para nosotros la educación es el arte de enamorarse del mundo y de todo lo que contiene. Y la forma de enamorarnos del mundo son siempre nuestras palabras: nuestras palabras escritas, nuestras palabras sonares y nuestras palabras gestuales. Lo más importante en educación es si somos capaces de enseñar a nuestros niños a enamorarse del mundo”, afirmó.

Para el autor, las palabras positivas contribuyen a lograr paz interior para afrontar los retos del día a día. “El lenguaje no es solamente un sistema de comunicación, es un sistema en el cual habitamos el mundo y la forma de estar en el mundo”, apuntó el autor de libros como Educar en lenguaje positivo, el poder de las palabras habitadas.

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Castellanos cree que el lenguaje diseña nuestra personalidad y nuestra vida. “El lenguaje positivo es la capacidad de escoger y elegir las palabras que pueden hacer que nosotros tengamos una buena historia de vida con un protagonista digno”, aseguró.

“Lo más importante para nosotros es la capacidad de que, en el momento en que pensamos, no pensemos con juicios, sino qué hacemos y qué podemos hacer aquí y ahora”, agregó.

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El especialista mostró un ejercicio de gratitud diario para aplicar en las familias, con tres agradecimientos durante 21 días. “El agradecimiento lo que te hace es que tu cerebro cambie porque está buscando su lado favorable de la vida, digamos es el lenguaje positivo, no estoy buscando lo negativo”, planteó el investigador.