En entrevista con Sana Mente, el director ejecutivo de la Fundación Educativa, Creatividad, Aprendizaje e Innovación, Marcelo Maira, ahondó sobre cómo CAI brinda apoyo a cuidadores de personas con autismo mediante programas lanzamos en pandemia.
El Centro de Atención Integral (CAI) es una organización sin fines de lucro que trabaja para mejorar la calidad de vida de las personas con autismo y sus familias en Chile. Durante la pandemia, se dieron cuenta de que era difícil observar el aprendizaje de los niños, niñas y adolescentes debido al uso de dispositivos, por lo que decidieron enfocarse en los cuidadores.
En entrevista con Sana Mente, Marcelo Maira, director ejecutivo del CAI, detalla cómo se dieron cuenta de que las necesidades de los cuidadores eran enormes y cómo han trabajado para cuidar a quienes cuidan.
“Lo primero fue decir bueno, entreguémosles nuestra metodología, para que ellos adquieran más herramientas para poder trabajar en los momentos de confinamiento con sus hijos e hijas, pero nos dimos cuenta de que las necesidades de las cuidadoras y cuidadores eran enormes”, dice Maira.
CAI decidió entonces ofrecer herramientas, contenido y conocimiento a los cuidadores, además de fortalecer el espacio de crear comunidad de encuentros y acompañamiento. El autocuidado también se convirtió en un factor determinante.
En la actualidad, la red de la fundación tiene tres líneas de acción para cuidar a quienes cuidan. La primera es el desarrollo de programas, que se desarrollan de manera permanente en el año. Los programas son tres, dos online y uno presencial que se llevará a cabo a partir de este año.
Según Maira, la pandemia puso en valor el rol del cuidador como nunca antes. “Yo creo que si la pandemia algo hizo, la pandemia puso en valor, como nunca antes, el rol del cuidador y la cuidadora”, dice Maira.
“Quién cuida a quien cuida. Eso fue fundamental para nosotros poder entender que nosotros, por un lado, podíamos entregarles contenido de acuerdo a sus necesidades y también entregarles herramientas para que ellas estén mejor para poder cuidar a otro”, agregó.
En lo que se refiere a la importancia de involucrar a los hombres en este proceso, Maira detalló que “los hombres están involucrándose más. Al principio teníamos hombres y como que se fueron yendo, pero son las cosas que suceden. Lo importante es que esta red ha ido creciendo”, dice Maira.
En resumen, el CAI ha trabajado arduamente para cuidar a quienes cuidan, ofreciendo herramientas, contenido y conocimiento a los cuidadores de personas con autismo. La pandemia ha puesto en valor el rol del cuidador como nunca antes, y es fundamental involucrar a los hombres en este proceso. La red del CAI ha ido creciendo y esperan seguir apoyando a los cuidadores en el futuro.