¿Sirve realmente un teclado mecánico? El Alloy FPS RGB de HyperX es un arma filosa sólo para los expertos
Por Joan Xavier Alemany
03.04.2019 / 14:55
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Tu desempeño en el shooter competitivo se verá incrementado en el largo plazo gracias a los milisegundos extra de reacción que entrega el diseño de sus teclas. Sin embargo, y pese al buen look, los más alejados del género arriesgan atravesar por algunas incomodidades.
Con el correr de los años la industria dedicada al gaming sigue creciendo en calidad y diversidad. Ahora hay accesorios para todo, pero el teclado sigue siendo el más esencial. Más allá del estilo y el diseño, la pregunta que todo el mundo se hace antes de abrir la billetera es qué tan determinante es a la hora de jugar.
Probamos durante un mes el teclado mecánico Alloy FPS RGB de HyperX para comprobar su influencia en shooters como Battlefield V y The Division 2, y el resultado puede tranquilizar fácilmente a quienes estén dispuestos a gastar para conseguir un mejor rendimiento.
Lo primero que debemos mencionar, y un tema no menor, es el look del teclado. Tiene la disposición clásica de todos los demás, incluyendo el numpad de la derecha. Todo en una dimensión bastante estándar y compacta de 44,2 x 12,9 cm.
Tiene mucha gracia en este aspecto, en primer lugar porque la estructura es de aluminio y es más robusto de lo que se acostumbra. Pero, por otra parte, porque las teclas están elevadas hasta una altura total que supera los 4 cm.
Esa elevación adicional hace que los led de la base se noten más y generen un aura que envuelve a cada pieza, con lo que la estructura completa se ilumina de acuerdo a tu configuración.
Son más de 16,7 millones de colores, todos muy brillantes, los que puedes elegir y almacenar en tres perfiles en la memoria interna del teclado.
Además de los estilos de iluminación que están en la mayoría de los teclados RGB que permiten asignar colores por cada una individualmente, puedes personalizar varios efectos como el de explosión, que crea una “onda expansiva” al pulsar cada tecla, o de “flamas” que también se gatillan al tipear sin ser demasiado vistoso.
Algo muy bueno es la posibilidad de carga móvil directamente desde el teclado: tiene un puerto USB destinado para mantener la batería del teléfono a un costado del mesón. Con eso -los gamers entenderán- te ahorras inmediatamente un enchufe a la corriente.
Sin embargo, uno de los puntos que me obligó a tener precauciones adicionales tiene que ver con el diseño y la extrema sensibilidad de las teclas, ya que al estar tan arriba del horizonte de la mesa es fácil gatillar imputs indeseados con la parte externa de la palma de las manos, justo bajo el meñique.
En un setup clásico WASD, inclinarte rápidamente hacia la A puede activar la tecla Windows e incluso el Ctrl.
En esto sobresale. No cabe duda de que la diferencia en tiempos de reacción es notorio respecto a un teclado convencional.
Todo tiene que ver con las teclas ultra sensibles Kailh Silver Speed con un punto de actuación en 1,1 mm y con un recorrido total de 3,5 mm. Si bien no te entrega una ventaja que asegure más kills, sí te permitirá una mayor agilidad táctica al poder terminar de recargar antes y cambiar de dirección rápidamente cuando estás en la línea de fuego del enemigo.
Para los que se acostumbran al rol de sniper realmente no tendrán un upgrade notorio como sí ocurre con los soldados de asalto -o equivalentes-, ya que las arremetidas respetan a tus reflejos de la manera más fiel posible. Sobrevivir del área de efecto de una granada o agacharte a tiempo depende mucho de esos pocos frames de respuesta que puedes optimizar con el Alloy FPS RGB.
La ventaja se mide en milisegundos, así que definitivamente deberás evaluar antes de comprar si es que tu juego sale de la arena casual para aprovecharla.
Del mismo modo, si no estás pensando en explotar tus capacidades en shooters, es poco lo que podrás apreciar en materia de desempeño. Tal vez, y en determinados contextos, los milisegundos extra te podrán ser útiles en RTS si eres de los que hace micro frenéticamente con los atajos.
Para lo que definitivamente no es tal útil es para redactar. Habiendo probado otros teclados y luego de años en la labor de la escritura, la altura de las teclas y el recorrido de las mismas generan una sensación bastante extraña.
Realmente las letras salen muy rápido a la hora de tipear, eso es bueno, pero si no tienes algo para apoyar tus manos y no levantas tus dedos lo suficiente, primero, te cansarás y, segundo, accionarás muy seguido las teclas a los costados de la barra espaciadora por accidente.
Puedes confiar en este teclado si quieres look y feedback. Tiene un sonido adictivo, las teclas iluminan toda la pieza y, además, tiene un tiempo de respuesta satisfactorio para jugar competitivamente. Sin embargo, olvídate de gastar tanto si redactas textos largos y lo haces muy seguido, ya que su hipersensibilidad y altura son un arma de doble filo.
Las actividades están enmarcadas en el lema "Salgamos a jugar", por lo que el énfasis estará en los juegos tradicionales y la "transmisión intergeneracional de la riqueza cultural". La jornada se realizará en 16 regiones del país.