Se trata de Airmob, app monitorea el aire en tiempo real y que permite navegar la ciudad por las rutas más limpias. La iniciativa cuenta con la colaboración de Red de Salud UC CHRISTUS, que entrega consejos, información y medición en todos sus puntos de atención.
La contaminación atmosférica provoca 4,2MM de muertes al año, cifra que fue entregada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en base esta problemática que afecta ciudades y zonas rurales del mundo.
Se trata del problema de salud pública más grave en el mundo, que por estos días se encuentra en el peak de enfermedades respiratorias y contaminación. En invierno smog aumenta, así como aumenta también la demanda hospitalaria por temas respiratorios.
Tanto así, que en un 50% se elevó la circulación del virus sincicial durante las últimas semanas, por lo que el llamado del Ministerio de Salud es al autocuidado para evitar el contagio.
Un dato poco conocido es que el aire mueve las partículas contaminantes a lo largo del día y es posible trazar rutas o coordinar la ventilación de nuestros hogares para horarios o calles menos contaminadas.
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En base a esta información es que nació Airmob, app que permite navegar la ciudad por las rutas más limpias. Airmob monitorea el aire en tiempo real de toda la ciudad mientras que Red de Salud UC CHRISTUS colabora a través de consejos, información y medición en todos sus puntos de atención.
De este modo, junto a más de 140 otros centros de monitoreo en Santiago, informan en tiempo real la calidad del aire y las alternativas para trazar rutas limpias, por lo que hoy es la red de medición de la contaminación más grande del mundo con data en tiempo real.
Descubre el aire que respiras”, es el llamado de la app que se pone a disposición del autocuidado de todos los chilenos. “Entre una calle y la siguiente la contaminación puede ser incluso el doble. Hoy podemos ver el esmog en tiempo real, detectar fuentes de emisión y evitar calles contaminadas”, afirma Antonio García, fundador y CEO de Citysense, plataforma para desarrollar soluciones Smart City e IoT conectadas con la ciudad, entre estas Airmob app.
Efectos de la contaminación ambiental
Para la doctora Carmen Venegas, médico broncopulmonar de UC CHRISTUS, “la contaminación ambiental -en especial el material particulado fino- afecta a los bronquios, a las vías respiratorias, al sistema cardiovascular y al sistema neurológico, entre otros”.
“Este material tan fino no solo tiene la capacidad de entrar por las vías respiratorias, sino que también de penetrar en la sangre y, por lo tanto, dañar el resto de los órganos. Está comprobado que el material particulado fino y todo tipo de contaminación ambiental, aumenta la prevalencia de enfermedades respiratorias crónicas; no solamente asma, enfisema pulmonar y fibrosis pulmonar, sino que también cáncer pulmonar”, agregó.
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Por otra parte, al hacer deporte las personas respiran hasta 16 veces más aire. César Kalazich, deportólogo del Club Deportivo Universidad Católica y miembro de la Unidad Médica de Medicina Deportiva UC, comenta que existen estudios que comparan el rendimiento de deportistas realizando ejercicio en ambientes contaminado versus no contaminados, reduciéndose en más allá del 60% el rendimiento cuando hay contaminación atmosférica.
Además, el doctor Homero Gac, Coordinador de la Unidad Geriátrica de Agudos de Clínica San Carlos de Apoquindo, enfatiza también en el público mayor: “Por los cambios propios del envejecimiento, las personas mayores tienen una mayor susceptibilidad a contraer infecciones respiratorias. La disminución de la inmunidad y un árbol respiratorio más permeable a virus y bacterias hacen que la contaminación sea especialmente dañina para este grupo etario”.
Además, recomienda evitar exponerse a zonas de alta contaminación o a zonas de alta aglomeración de personas y partículas en suspensión, “pues eso ayuda a evitar infecciones. Cuadros infecciosos que podrían ser menores en gente joven pueden ser muy complejos e, incluso, llevar a la muerte a las personas mayores”, señala.