Moff es la palabra japonesa para amigable. Su creador, Akinori Takahari, quería desarrollar un juguete para estimular a los niños a usar su imaginación y ser más activos en lugar de ver una pantalla.
La idea es rescatar los juegos tradicionales; una cuchara podría ser un palillo, o una rama se transformaría en una varita mágica. ¡Moff sólo añade los sonidos!
La pulsera tiene un acelerómetro y un giroscopio que convierten los movimientos de la muñeca en comandos enviados a la app. Se conecta a través de bluetooth con el teléfono inteligente.
Moff ya está disponible en Japón. Pronto en los Estados Unidos y otros lugares.
Experto en política estadounidense y ex subsecretario de Asuntos Hemisféricos de EE.UU., el cientista político chileno analiza las elecciones presidenciales y su impacto en la relación de EE.UU. con América Latina.