Estudio identificó que las mujeres empatizan mejor que los hombres

Por CNN Chile

28.12.2022 / 12:33

{alt}

La investigación de la Universidad de Cambridge evaluó los procesos de empatía cognitiva y afectiva a través de un método que ayuda a medir la capacidad de una persona para reconocer el estado mental o las emociones de otra.


(CNN) – No importa en qué parte del mundo vivan ni cuáles sean sus influencias culturales o familiares: en general, las mujeres son mejores que los hombres a la hora de empatizar con otras personas, según un estudio publicado este lunes en la revista PNAS.

Los investigadores, de la Universidad de Cambridge (Reino Unido), afirman que el estudio es el mayor de este tipo realizado hasta la fecha sobre una forma concreta de empatía, algo que los científicos denominan “teoría de la mente” o “empatía cognitiva“.

La empatía es una cualidad importante porque rige la forma en que las personas interactúan socialmente e influye en el modo en que se desarrollan sus relaciones personales.

La empatía cognitiva es cuando una persona es intelectualmente capaz de entender lo que otra persona puede estar pensando o sintiendo, e incluso es capaz de utilizar ese conocimiento para predecir cómo actuará o se sentirá esa persona en el futuro. Así, por ejemplo, si una persona te cuenta que pasó un mal rato con su familia durante las vacaciones, una persona con empatía cognitiva entenderá cómo le hace sentir ese mal rato poniéndose intelectualmente en el lugar de esa otra persona, por así decirlo.

Es diferente de otro tipo de empatía llamada empatía afectiva -o emocional-, cuando una persona siente las emociones de otra y responde con una reacción o emoción apropiada. Por ejemplo, si alguien llora por la ruptura de una relación, una persona con empatía emocional empezaría a sentirse triste también y, en consecuencia, sentiría compasión por esa persona.

En el sitio web de la Universidad de Cambridge hay un test que evalúa ambas formas de empatía. Para llevar a cabo este nuevo estudio, los investigadores utilizaron una prueba distinta, denominada “Reading the Mind in the Eyes Test” (Test de lectura de la mente en los ojos), la cual ayuda a medir la capacidad de una persona para reconocer el estado mental o las emociones de otra.

En la prueba se pide a los participantes que miren fotos de la zona que rodea los ojos de una persona. La persona hace un tipo concreto de expresión facial y el participante en el estudio debe identificar lo que esa persona está pensando o sintiendo de entre una serie de posibilidades. Los científicos suelen utilizar esta prueba para ayudar a determinar si alguien tiene problemas mentales o cognitivos. Investigaciones anteriores demostraron que las personas con autismo, por ejemplo, suelen obtener puntuaciones más bajas en estas pruebas, al igual que las personas con demencia y las que padecen trastornos alimentarios, entre otras.

Para ver si las diferencias culturales influían en las puntuaciones de empatía, se recogieron datos de equipos de todo el mundo. Los autores del estudio trabajaron en la Universidad de Cambridge y la Universidad de Harvard en Estados Unidos, la Universidad de Bar-Ilan y la Universidad de Haifa en Israel, así como en Italia en la Escuela IMT de Estudios Avanzados Lucca. Fusionando sus resultados con grandes muestras de distintas plataformas en línea, los autores del estudio pudieron captar los resultados de casi 306.000 personas de 57 países, entre ellos Argentina, Croacia, Egipto, India, Japón y Noruega.

En 36 países, las puntuaciones promedio de las mujeres en empatía cognitiva fueron significativamente más altas que las de los hombres. En 21 de los países, las puntuaciones de mujeres y hombres fueron similares. No hubo ni un solo país en el que los hombres obtuvieran, en promedio, mejores puntuaciones que las mujeres. Los resultados se obtuvieron en ocho idiomas y en todas las etapas de la vida, desde los 16 hasta los 70 años.

Los científicos observaron lo que el autor David M. Greenberg denominó un “declive superficial” de la empatía cognitiva a medida que la gente envejecía. “Ese descenso superficial de la empatía plantea algunas preguntas sobre los factores que contribuyen a ella”, afirma Greenberg, psicólogo e investigador de la Universidad de Bar-Ilan y la Universidad de Cambridge.

El estudio no pudo determinar por qué se produce este declive. Greenberg dijo que podría ser en parte biológico; tal vez haya cambios hormonales que se producen en el cuerpo, o también podría ser algo social o ambientalmente impactante.

El estudio tampoco pudo explicar por qué las mujeres tenían mucha más empatía cognitiva que los hombres, ni tampoco pudo hablar de diferencias individuales entre los participantes. La conclusión se basa en investigaciones anteriores que llegaron a la misma conclusión: que las mujeres tienen puntuaciones de empatía cognitiva más altas que los hombres.

En algunos de esos estudios anteriores, las diferencias de sexo en la empatía se atribuían a veces a factores biológicos y sociales. Algunos estudios en animales y en bebés también muestran esta diferencia de sexo en la empatía. Es posible que existan diferentes vías genéticas subyacentes al desarrollo de este tipo de empatía en los distintos sexos.

Comprender las diferencias sexuales en la empatía podría ayudar a los investigadores a entender mejor por qué determinados problemas de salud mental afectan más a los hombres que a las mujeres. Según los investigadores, este último estudio también podría ayudar a los científicos a desarrollar un mejor apoyo para las personas que pueden tener dificultades para leer las expresiones faciales.

“Este estudio demuestra claramente una diferencia de sexo muy consistente entre países, idiomas y edades”, dijo en un comunicado de prensa Carrie Allison, coautora del estudio y directora de Investigación Aplicada del Centro de Investigación del Autismo de la Universidad de Cambridge. “Esto plantea nuevas preguntas para futuras investigaciones sobre los factores sociales y biológicos que pueden contribuir a la diferencia de sexo observada en promedio en la empatía cognitiva“.