Libido baja: 7 motivos por los que tal vez no quieras tener sexo y qué puedes hacer al respecto

Por CNN Chile

28.09.2023 / 11:52

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La libido puede estar influenciada por factores socioculturales como la educación, religión y edad, o también físicos, como el ciclo menstrual en el caso de las mujeres. La autora del libro "El secreto peor guardado", Odette Freundlich, explica qué puedes hacer si buscas tener un bienestar sexual pleno.


La libido es diferente en cada persona, ya que está influenciada por factores socioculturales como la educación, religión y edad, y además puede cambiar dependiendo de la etapa de la vida. En el caso de las mujeres, también influye el ciclo menstrual; por ejemplo, previo a la ovulación, se produce una mayor motivación sexual, pues los niveles de estrógenos se elevan.

La directora del Centro Miintimidad y autora del libro El secreto peor guardado, Odette Freundlich, explica que, aunque la disminución de la libido o deseo sexual la mayoría de las veces es normal, hay ciertos factores que lo agudizan.

Estas son los 7 factores más comunes que pueden afectar tu libido de acuerdo a la kinesióloga especialista en sexualidad:

1. Dolor en las relaciones sexuales

Algunas veces, al momento de mantener relaciones sexuales puede existir dolor, ya sea por irritación, inflamación, infección, espasmo o hipertonía de los músculos de la vagina y del piso pelviano, una cicatriz en el área genital, disminución de la lubricación, patología en el área pélvica (endometriosis, colon irritable, prolapso), entre otras causas.

Si sufres dolor, Freundlich recomienda consultar con un ginecólogo o un kinesiólogo experto en sexualidad, quien evaluará las posibles causas y propondrá un tratamiento a seguir.

2. Disminución de los niveles hormonales

En el caso de las personas menstruantes, en la etapa previa a la menopausia hay una disminución de las hormonas, especialmente de la testosterona y los estrógenos. Esto provoca que haya menos lubricación vaginal, atrofia genital y pérdida de elasticidad de los tejidos vulvovaginales.

La profesional aconseja usar lubricantes, dedicar más tiempo en los juegos preliminares, practicar ejercicios y mantener una alimentación saludable.

3. Exceso de estrés y cansancio

El estrés activa una sustancia llamada cortisol que afecta a las hormonas y al sistema nervioso, haciendo que el cuerpo se mantenga alerta, incluso, cuando no hay peligro.

Algunas formas de contrarrestar el estrés para que no influya en la vida sexual incluyen realizar actividades, practicar técnicas de respiración y dormir 8 horas diarias.

4. Ingesta de fármacos

Hay ciertos medicamentos que influyen en la respuesta sexual y el deseo, especialmente los antidepresivos.

Los efectos secundarios pueden disminuir con el tiempo a medida que tu cuerpo se va adaptando. Si esto no ocurre, conversa con tu médico y pídele que evalúen cambiar el medicamento que estás tomando. Nunca te automediques. 

5. Mala Alimentación

Una dieta desbalanceada, insuficiente en proteínas, minerales y vitaminas, genera un desequilibrio de la ingesta calórica y de nutrientes, por lo que disminuye la producción de ciertas hormonas como la testosterona, encargada del deseo sexual.

Para mantener una dieta equilibrada, la especialista recomienda consumir diariamente todos los alimentos de los grupos de la pirámide alimenticia, hacer ejercicio físico e hidratarse.

6. Monotonía

Después de mucho tiempo de repetir las mismas prácticas sexuales, los encuentros íntimos se pueden tornar aburridos.

La kinesióloga aconseja experimentar, ya sea cambiando el escenario del encuentro sexual, usando algún juguete sexual, conversando sobre las fantasías sexuales y viendo la posibilidad de llevarlas a cabo.

7. Conflictos de pareja

Las peleas, discusiones, infidelidades, falta de comunicación, poco apoyo en las labores domésticas, sentimientos de rabia y rencor, repercuten directamente en el apetito sexual.

Freundlich recomienda mantener siempre una comunicación efectiva con la pareja o consultar con algún terapeuta.

Si la libido baja se mantiene en el tiempo y no mejora con estos consejos, consulta con un profesional para así encontrar un tratamiento adecuado y personalizado, con el fin de lograr un bienestar sexual pleno.