Mientras termina su práctica, el joven continúa como una de las figuras más populares de YouTube en Chile.
En el día en que se dan a conocer los resultados de los puntajes de la PSU, el youtuber Benjamín Castillo, más conocido como el “Pollo” Castillo, habló sobre cómo es la vida después de la prueba.
Cuando salió del colegio, el “Pollo” asegura que “no sabía si estudiar comunicación audiovisual -porque siempre fui muy bueno haciendo videos- o algo con las matemáticas”, pero ambas cosas se tomaron su vida.
Ante la crisis existencial se tomó un año sabático donde estudió inglés, trabajó y trató de leer más, pero no tuvo mucho éxito con eso: “En el colegio me leía los resúmenes”, afirmó.
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Si bien la mayor parte del tiempo se conoce por sus videos subidos a redes sociales, en la vida real Castillo es practicante de Ingeniería Civil en “Mercado Libre”. Cuando iba en segundo año de carrera empezó a hacer sus clips porque pensó que se le ocurrían ideas graciosas.
Y tuvo toda la razón. Castillo llegó hasta los Copihue de Oro 2018 gracias a su doble vida, tiene más de 1,3 millones de seguidores en Facebook y más de 1 millón en su Instagram @pollosus. Lo más pobre es YouTube, con unos 380 mil.
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Castillo afirma que con su práctica profesional: “Se me han ocurrido un montón de ideas para videos. Le saqué full provecho, pensando que iba a ser la última vez que iba a estar en una oficina. Mercado Libre es una empresa de la nueva generación, liderada por jóvenes y donde trabajas a gusto, pero aún me gusta pensar que puedo manejar mis tiempos y no trabajarle a otros”.
En la entrevista, Castillo explica que ve a la universidad más como una prolongación del colegio, y que la vida no la hace la carrera que estudias.
“Mucha gente ve el trabajo como su vida y esta nueva generación intenta no hacerlo. Por eso se cambian tanto de pega: es la búsqueda de la felicidad constante. Yo quería hacer algo que me dejara mis tiempos y si me quería levantar tarde, poder hacerlo”, indica.
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De todos modos, asegura que el “cartón” ya le ha servido más del 1000%: “Una carrera como ingeniería agiliza tu cerebro y amplía tu óptica de ver als cosas, optimizas tu manera de organizar tu día, te haces más metódico (…) Mi cerebro está preparado para analizar el mundo desde una perspectiva más ingenieril, soy más calculista”.