El 27 de diciembre, John Oliver recibió su última ronda de quimioterapia. Para celebrar el regreso del niño a la escuela en Newbury, Ohio, sus compañeros lo recibieron con aplausos, sonrisas, saludos y vítores, como se ve en un emotivo video publicado en Facebook.
Un niño de 6 años que ha estado luchando contra el cáncer recibió una ovación sorpresa por parte de sus compañeros de clase cuando regresó a la escuela, después de terminar su última sesión de quimioterapia.
John Oliver Zippay ha estado entrando y saliendo del colegio, desde que le diagnosticaron leucemia linfoblástica aguda cuando tenía tan sólo 3 años, según afirma su padre John Zippay a CNN.
El 27 de diciembre, John Oliver recibió su última ronda de quimioterapia. Para celebrar el regreso del niño a la escuela en Newbury, Ohio, sus compañeros lo recibieron con aplausos, sonrisas, saludos y vítores, como se ve en un emotivo video publicado en Facebook.
Una pelea de tres años
Todo comenzó cerca de Halloween del año 2016, afirman John y su esposa, Megan, cuando John Oliver se cayó y se golpeó la cabeza contra la cabecera de la cama. Su cara se decoloraba y estaba letárgico, afirma su padre. Después de llevar a su hijo al médico, y varios análisis de sangre más tarde, su médico de cabezera los llamó a media noche y les instó a llevar a John Oliver a la sala de emergencias.
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Los signos apuntaban hacia una forma de leucemia. “Fue un verdadero shock. Desde entonces la palabra cáncer comenzó a aparecer de forma frecuente”, dijo John. Los padres del niño afirman que en el momento en el que escucharon la noticia, “Todo se detuvo”.
La pareja, junto a su hija mayor, pasaron 18 días en el hospital con John Oliver mientras le realizaron biopsias de médula ósea, transfusiones de sangre y varios exámenes.
Después de que el niño recibió su diagnóstico, los siguientes tres años consistieron en todos los tipos diferentes de quimioterapia y procedimientos.
Según su padre, Los efectos secundarios fueron muy fuertes y eso fue lo que hizo difícil para Oliver hacer algunas de las cosas normales que hacen los niños de su edad, y mucho menos estar en la escuela de manera constante.
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Aunque el niño de 6 años faltó tanto a la escuela, nunca se retrasó académicamente. El director de la escuela católica St. Helen, Patrick Gannon, le dijo a WJW, afiliada de CNN. “Tener que verlo perder tanto tiempo fue difícil, pero la clase estaba muy feliz de verlo regresar”, dijo Gannon.
Un sistema de apoyo como ningún otro
Durante el tratamiento de John Oliver, Megan documentó los buenos y malos días en un grupo de Facebook para que el sistema de apoyo de su hijo los siguiera.
“Nos consideramos tan afortunados y bendecidos”, dijo el padre. “Hemos tenido mucho apoyo de familiares, amigos, miembros de la comunidad, la escuela y el personal del hospital”.
En el último día de quimioterapia de John Oliver, las enfermeras, familiares y amigos se reunieron para que él pudiera tocar el timbre que tocan los pacientes cuando terminan su último tratamiento.
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“Y fue entonces cuando le dije, ‘está bien amigo, tienes que tocar el timbre. Toca para todos los niños que no tuvieron la oportunidad de tocarlo’ y todo se puso cámara lenta para mí”, dijo John. “Lo llamó tan fuerte que estaba muy orgulloso”.
John dijo que está ansioso por ver a su hijo hacer todas las cosas que los niños normales deberían hacer a esa edad ahora que se encuentra en una etapa más saludable de la vida.