Los McMahon no tuvieron una noche muy grata, esto, debido a que Shane apareció sin previo aviso mientras Vince y Stephanie dialogaban en el ring mientras la hija del dueño de la WWE recibía el premio Legacy of Excelence Award.
Fue ahí cuando Shane O’Mac ingresó a escena y molestó a Steph, y le hizo una serie de desaires a su padre, quien finalmente firmó su regreso, y no en pequeño, sino que a lo grande.
Así es como Shane se deberá enfrentar a The Undertaker en el próximo Wrestlemania 32 en un combate Hell in the Cell, que de llegar a ganar se quedará con el control de Monday Night Raw.
La defensa del mandatario aseguró que él fue víctima de acoso sistemático por parte de la mujer que, 10 años después de enviados los mensajes, presentó la denuncia en su contra.