ME-O sobre la marihuana: “No estoy a favor de las drogas pero creo que hay que despenalizar”

Además el editor de la revista Cáñamo manifestó que se deben buscar “nuevas políticas de drogas”. 

Durante la mañana de este sábado el candidato presidencial del Partido Progesista (PRO), Marco Enríquez-Ominami, se reunió con el editor de la revista Cáñamo y candidato a diputado, Claudio Venegas, para hablar sobre la creación de una nueva política de drogas. 

ME-O manifestó que el tema de las drogas no es “del barrio alto” sino de los “sectores populares, Chile y el Mundo” ya que “la droga está en aumento, el consumo y el tráfico” y se debe hacer un control de daños, donde se debe ser honesto en que “ningún Gobierno en cuatro años” podrá eliminar el problema “como lo anunció Piñera”, mientras que la ex mandataria Michelle Bachelet y el ex Presidente Ricardo Lagos, “cometieron un error porque transformaron la marihuana en lo mismo que cualquier droga dura” y ellos creen que se debe eliminar de esa lista. Aún así, el abanderado del PRO se mostró en contra de las drogas pero que se deben “despenalizar”. 

El editor de la revista Cáñamo cree que se ha “marihuanizado la discusión” porque no empieza ni termina con la marihuana sino que ellos buscan una “nueva política de drogas” en que también se necesitan para las que “más daño causen” como el alcohol y el tabaco, que son las legales. 

Venegas declaró como “absurdo” que Manuel Lagos se tuviera que declarar culpable “por un delito que no ha cometido” para “no pasar más días en la cárcel”, es un ejemplo de lo que ocurre “todos los días”. 

Respecto a la condena de los ex ejecutivos en el Caso Farmacias, el abanderado del PRO enfatizó que “hasta el día de hoy hacen clases de ética”, mientras que quienes consumen marihuana “está condenado como traficante”, por lo que se debe aprender a convivir “con las libertades civiles por tanto se requiere un Estado moderno”.  

Sobre la conmemoración de los 40 años del golpe militar por parte del Gobierno, Ominami enfatizó que “el problema del golpe de Estado es un problema ético” no de política porque está la “ética en juego” y que es “impropio que tengamos un debate político”, agregando que no es aceptable que “sea usado el Estado para matar”.